Sin duda si has escogido a la capital Austriaca como tu próximo destino para hacer turismo recorriendo sus calles, está en tus planes o simplemente quieres conocer y saber un poco de esta emblemática y extraordinaria ciudad debes informarte sobre algunas de las curiosidades de Viena y seguir la guía de Viena.
Pasear por la ciudad más grande de Austria, apodada la Ciudad de la Música, es como dar un paso atrás en el tiempo, lo que representa Viena es algo que sinceramente debes conocer, es una ciudad musical, donde la ópera predomina, es la cuna de famosos compositores como Beethoven, Strauss y Mozart, además de poseer una maravillosa cultura, también posee una gastronomía exquisita al paladar, quizás uno de los destinos más interesantes de Europa.
Si ya estás en Viena, cuando termines de leer este artículo, no te olvides de degustar el exquisito café del café Central de Viena o la famosa tarta sacher en el Hotel Sacher
Viena, ciudad de la música
Una de las curiosidades de Viena es que es reconocida como la ciudad de la música gracias a que en ella se formaron grandes representantes de la música como lo fueron Mozart, Strauss, Beethoven, Schubert y Brahms, y desde ahí se convirtió la música en principal protagonista de esta capital austriaca lo puedes ver y sentir claramente en sus calles.
Viena es productora de vino
Esta maravillosa ciudad es la única de las capitales en el mundo que produce su propio vino, ya que se ha vuelto una tradición de años, en la estación de primavera es muy común encontrarse a las afueras de la ciudad con los famosos “Heurigens” que no son más que locales que sirven comida y vino de la propia cosecha hasta que se agotan las existencias, pues también tienen una cantidad limitada de comida y cierran hasta el año siguiente.
Además cada habitante de esta ciudad o del país puede vender su propio vino sin necesidad de tener una licencia, simplemente producirlo y colocarlo en el menú es una de las más increíble curiosidades de Austria.
Viena tiene el zoológico más antiguo del mundo
Quizás una de las más interesantes curiosidades que ya forman parte de la historia Viena y unos de los lugares que no puedes dejar de visitar en Viena es este zoológico con más de 300 años de antigüedad creado en 1752 y lleva por nombre Tiergarten Schönbrunn.
Por otra parte, además de ser uno de los zoológicos más antiguos del mundo es uno de los mejores, debido al excelente trato con que cuidan y protegen a los animales, siendo considerados por varios expertos como el mejor de todo el continente Europeo.
Construido en los jardines del Palacio de Schönbrunn, el zoológico fue en su día la reserva privada del emperador Francisco Esteban y la emperatriz María Teresa.
Cuenta con más de 700 especies animales diferentes y además, por su original arquitectura barroca, también es considerado el zoológico más bello del mundo. Es una de las cosas que no puedes dejar de ver en Viena
Uno de los conciertos filarmónicos más grandes
Uno de los más famosos conciertos filarmónicos del mundo es realizado cada año en esta capital austriaca, es reconocido en todo el mundo, y llama la atención de miles de personas.
El Concierto de Año Nuevo de la Filarmónica de Viena tiene lugar en la sala dorada o sala grande de la Wiener Musikverein de esta ciudad, y se realiza el día 1 de enero de cada año, en su mayoría con música de la reconocida familia Strauss, culminando siempre con el famoso vals “El Danubio azul”.
Si quieres asistir a este concierto de año nuevo debes tener en cuenta que el poder optar a la comprar las entradas se hace bajo sorteo
Uno de los cementerios más grandes de Europa
Se suele decir que los vieneses tienen una cierta veneración y culto a la muerte y esto surge de la importancia que ellos suelen darle a esta, y esto lo demuestra el gran cementerio que tiene más personas enterradas en él, que el número de la población actual. Este es el famoso Zentralfriedhof con más o menos 2,5 km2 que es uno de los más extensos de la capital austriaca y queda en el tercer lugar de los más grandes de Europa, además en ella reposan los restos de grandes personajes históricos como el gran compositor Beethoven.
En Viena se inventó la bola de nieve
La bola de cristal con nieve se inventó en Austria en 1900 cuando Erwin Perzy intentaba mejorar el brillo de las bombillas de una lámpara quirúrgica: añadió agua y copos de sémola, con la esperanza de que la luz rebotara en ellos y les diera un brillo más brillante. Eso no sucedió, pero el efecto fue sorprendente. La producción en masa comenzó en Viena en 1905 por su compañía, Original Vienna Snow Globes, y los copos siguen cayendo hoy en día. Ahora dirigido por su nieto, Erwin Perzy III, el negocio familiar ha hecho bolas personalizadas para Bill Clinton, Ronald Reagan y las Primeras Hijas Sasha y Malia Obama.
Más de 100 años después, siguen fabricando globos de nieve tradicionales en Viena, todos pintados a mano y ensamblados manualmente. Si hablamos de comprar cosas típicas de Viena, debes de apuntarte esta
Croissants Austriacos
La famosa repostería francesa es de origen vienés. Se basan en el kipferl austriaco, que significa media luna en alemán. Los panaderos de Viena hicieron kipferl para conmemorar la victoria de Austria sobre los turcos otomanos en 1683, su forma se basa en las semilunas vistas en el uniforme del enemigo.
En 1770, cuando María Antonieta de Austria se casó con el rey Luis XVI de Francia, introdujo su pastelería favorita en Francia. Los franceses hicieron algunos cambios y lo llamaron croissant.
La noria Riesenrad
El Wiener Riesenrad, construido en 1897, es la noria más antigua del mundo que aún funciona. Situada en el parque de atracciones Wurstelprater, es una de las atracciones turísticas más populares de Viena. Para muchos, es también un símbolo de la ciudad. Es quizás más famoso por su papel en la película de 1949 El tercer hombre, considerada una de las más grandes de todos los tiempos.
Si no sabes que hacer en Viena, empieza subiendo a esta noria. Te sorprenderás con sus estupendas vistas desde unos 65 metros de altura
Los caramelos PEZ
Pez, los divertidos caramelos de tableta que todos conocemos y adoramos, fueron inventados en Viena en 1927. El nombre Pez es una abreviatura de la palabra alemana «pfefferminz», que significa menta. Porque los caramelos originales de PEZ sólo venían en ese único sabor. El dispensador fue inventado en 1949, diseñado para parecer un encendedor. Fumar estaba prohibido en esa época, así que el eslogan de Pez era «No Fumar – PEZing Permitido».
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